Este coches es tan rápido que llega a los 100 km/h en 4,5 segundos y alcanza una velocidad máxima de 303 km/h. Su potencia y al mismo tiempo su eficacia se deben al programa para la reducción del rozamiento que el Maserati ha llevado a cabo, que se aprovecha de la longitud del vehículo e incluye la incorporación de un profundo splitter frontal integrado en la defensa delantera, faldones laterales y una defensa trasera totalmente nueva.
Además este super coche incorpora llantas de aleación de 20 pulgadas más ligeras de lo habitual.